Sun Tzu debió nacer en Gran Vía y montó academia. Nos están dando con todo. Pero, ¿quién es el enemigo sombrío que nos roba los ánimos, reduce nuestra renta real, se carga sin compasión los puestos de trabajo y nos enfrenta los unos a los otros haciendo que nos señalemos con el dedo?
No lo se. Supongo por ello que Sun Tzu habrá tenido algo que ver, porque la estrategia es magistral. Creo que ha estas alturas del partido nadie se cree ya que exista la izquierda o la derecha. Puede que haya políticas heredadas de otros tiempos que se puedan tildar así, pero el espíritu de las clases sociales se está devaneciendo como el humo, por no decir que ya están muertos.
Y sin embargo todos los días, la pantomima nacional, con sus Zapateros y sus Rajoys, con los sindicatos de clase subvencionados por el gobierno de turno, con sus huelgas decimonónicas y sus empresarios de «vamos a echar a todo el mundo para que nos salgan las cuentas«.
En la calle, todos convencidos de la insolidaridad del vecino, de las malas artes, del no te fíes, del quítate tú pa’ ponerme yo. Y Belén Esteban, … la princesa del pueblo nombrada por no se que cadena. Y no es que yo le vaya a negar el título de princesa a ninguna mujer, pero que no nos la coronen las mismas «teles» que nos despistan de los problemas reales. Los mismos mecanismos que hacen que el fútbol nos importe más que nuestra formación o que el pan que nos llevamos a la boca. Esas que llaman corazón al petardeo y que toman partido como «putas» acabando con la poca objetividad que le daba sentido a la profesión de periodista.
Este bipartidismo está demostrando servir a unos únicos intereses, a los del Capital. La clase media o ya es historia o se aferra con uñas y dientes al poco espacio que le deja un capitalismo mundializado, feroz y anónimo. O lo que es lo mismo, un gigante monstruoso y cobarde que no da la cara por que no la tiene.
Aquellos que gobiernan tienen todos los recursos intelectuales y materiales para hacerlo bien, y si no lo hacen es porque no quieren, y simplemente hacen bien el servicio de favorecer a aquellos que los mantienen en el poder.
Sun Tzu no lo hubiera hecho mejor porque aunque todos nos preguntemos: ¿por qué nadie hace nada?,¿por qué la gente no se mueve ?… no movemos un sólo dedo que no sea a la comparsa del sistema, aunque estemos convencidos de lo contrario.
La libertad murió en España el 23 de Marzo de un año sin vergüenza ni misericordia. La muerte nació el mismo día para la España de la Democracia. Ya todo es pantomima y sálvese el que pueda.