Vamos a construir un mega-server, lo que no significa que vayamos comprar lo último de lo último, ni lo más caro. Necesitamos ser conscientes de nuestras necesidades y de los recursos que necesitamos para cubrirlas. Seguramente contamos con «retales» informáticos como procesadores, módulos de ram, discos,…
Hemos de ser conscientes que un servidor es un ordenador que se construye para estar constantemente encendido y en el que es tan importante preguntarse las necesidades de rendimiento como las repercusiones en el consumo.
1º. Procesador:
Sería deseable un procesador que no se calentase demasiado y que no consuma demasiada potencia a no ser que se solicite capacidad intensiva de procesamiento. No necesitaremos que sea muy rápido a no ser que lo utilizemos para copias de seguridad del propio sistema que requieran comprimir los datos, la verificación de virus en sistemas que compartimos vía samba, virtualización intensiva o el uso de bases de datos SQL de forma agresiva . Es preferible un sistema multi-núcleo para que todos los núcleos funcionen muy levemente y nunca suba demasiado la temperatura.
2º. Memoria Ram:
Linux consume muy poca ram en comparación con otros sistemas operativos como Windows u OSX. Si no vamos a virtualizar, con dos gigas de ram nos sobrará casi siempre 1,4 Gigas. Sin embargo es recomendable contar con este exceso de ram por si en algún momento necesitamos de ella. Este exceso nos permite evitar el acceso al área swap de intercambio que simula memoria ram sobre el propio disco duro lo que ralentiza el rendimiento del sistema.
La gran razón para aumentar el tamaño de la memoria ram es la virtualización. Un Windows 7 requiere 2 Gb de ram en su versión 386. Un ubuntu en versión gráfica unos 512Mb siendo recomendable aumentarle a 1Gb. Dependiendo de lo que quieras virtualizar tendrás que contar con más o menos ram.
Es importante tener en cuenta que las bahías de ram suelen ser dobles, es decir, tiene un rendimiento mayor la ram alcanzando velocidades superiores cuando se instalan los módulos de dos en dos. Luego normalmente, la ram instalada suelen ser multiplos de 2 Gb.
3º. Tarjeta gráfica:
La mayor parte de las placas de servidor incluyen una gráfica integrada con una memoria de unos 16 Mb. Un servidor no suele necesitar una tarjeta gráfica potente, a no ser que desempeñe labores de escritorio que si lo requieran. En el caso de que tu placa no integre un chipset gráfico, lo mejor es una tarjeta modesta que tenga unos cuatro años de antigüedad. Googlea un poco e informate de la compatibilidad con Linux antes de decidirte por una u otra. Además ten en cuenta que una gráfica potente supone un aumento de consumo eléctrico innecesario para un servidor.
4. Discos duros.
El disco duro es uno de los elementos que más electricidad consumen y que más calor generan en la caja. Es importante alejar de los procesadores los discos que más se calienten.
Hay versiones de discos a 5400 rpm equivalentes en capacidad a las versiones de 7200 rpm que se mantienen practicamente fríos y que ofrecen una perdida de rendimiento debido a la baja velocidad casi inapreciable. Sin embargo, hay discos a 7200 rpm que se calientan muy poco. No hay una regla general y en muchos casos las que hay no funcionan.
Un servidor en Linux nos permite aprovechar los discos viejos que comienzan a ser peligrosos por las muchas horas de funcionamiento. Podemos combinarlos en raid para aumentar la capacidad global de las unidades raid y para que se respalden entre si en el caso de que uno falle. Estas combinaciones son ideales para copias de seguridad de otros equipos, pues sería muy improbable que fallaran a la vez el ordenador del que realizamos la copia de seguridad y el raid en que hacemos la copia.
Los archivos que compartimos en el servidor y que no están respaldados en ningun otro equipo, como programas de instalación, audio y video, son los que merecen los discos más nuevos y rápidos, montados en un raid de la máxima seguridad como el raid 0 y el raid 10.
5. La placa madre:
Para un servidor casero en linux lo más importante son las conexiones sata pues queremos compartir toneladas de archivos que residen en discos duros. Buscaremos una placa con el máximo número posibles de estas, teniendo en cuenta que cuando una placa viene con más de ocho conesiones sata suele tener integrado una controladora raid y debemos asegurarnos de que sea compatible con Linux, o al menos transparente para que el propio Linux pueda acceder a los discos duros como si se tratara de una controladora normal. En el caso de que no sea así, con altísima probabilidad, os supondrá un auténtico dolor de cabeza el configurar la controladora para que Linux la reconozca. Es importante investigar a este respecto. Si la placa no viene con más de seis u ocho puertos sata, sería recomendable hacerse con una controladora sata para conectar más discos duros.
También debemos tener en cuenta las ranuras de ram disponibles. Cuantas más tenga, menos nos costara la ram y más podremos aumentarle en un futuro si fuera necesario. Los módulos de ram aumenta el precio más que proporcionalmente respecto de su capacidad. Es decir, un modulo de 2Gbs cuesta normalmente más que uno de 1Gb de las mismas características, y nos puede compensar comprar cuatro modulos de 1Gb a día de hoy y 2 de 2Gb dentro de un par de años debido a la caida de los precios debida a la obsolescencia.
Es recomendable que las tarjetas ethernet que venga integradas sean gigabit con soporte para jumbo frames.
6. Tarjetas de red:
Se recomiendan tarjetas ethernet gigabit con soporte para jumbo frames.
7. Software raid o hardware raid:
Hay controladoras raid como comentaba que se encarga de gestionar los grupos de discos. De este tipo de controladoras hay de varios tipos:
a. fake raid.- o raid falso, que consumen recursos del procesador principal y normalmente no suponen un aumento de rendimiento.
b. Semifake raid.- Son aquellas que siguen consumiendo recursos del procesador principal pero agilizan el raid debido a que realizan cálculos sobre la paridad.
c. True raid. Son las mejores porque no consumen nada del procesador y agilizan considerablemente el raid. En la mayoría de los casos vienen con memoria integrada memorizando las transferencias de información salvaguardando al conjunto de una caida puntual de corriente en el ordenador.
El hardware raid presenta en todos los casos un inconveniente fundamental para el usuario doméstico. Si se estropeara la tarjeta por cualquier razón, o fallara la placa en la que viene integrada habría que encontrar otra placa u otra tarjeta con el mismo chipset raid para recuperar nuestra información. Esto significa que si tenemos una controladora raid en nuestro equipo debemos asignarle grupos de discos con información no crítica, como por ejemplo, copias de seguridad de otros equipos. Es recomendable asignarle grupos raid “stripe” o “raid 5”(que ofrece una protección por paridad aunque reduce un poco el rendimiento) para obtener la máxima capacidad disponible y el mayor rendimiento.
La forma más segura de gestionar nuestra información en linux es con el DM raid de linux en modo raid 0(espejo) y raid 10 (espejo más stripe). El raid 0 es ideal para el sistema de arranque del servidor que no requiere de mucho espacio, y en caso de falla de un disco, el servidor seguirá arrancando. El raid 10 es el ideal para compartir la información crítica por el aumento de seguridad que supone el respaldo de cada uno de los discos del raid, y el aumento de velocidad al sumar la velocidad de los grupos raid 0.
Lo que no se recomienda con DM raid, es generar raid5, que aunque cuentan con la ventaja de solo consumir un disco para guardar la información de paridad, en caso de fallo del sistema se puede perder todo el raid con una probabilidad mucho mayor que con un raid 10.
8. La caja.
Es quizás una de las partes más importantes. Necesitamos una caja grande y bien ventilada para montar nuestros sistemas de discos. Es preferible que cuente con muchos ventiladores de bajo ruidi (17dB) muy bien distribuidos para tenerlos a muy pocas revoluciones, lo que permite tener bien ventilada la caja con un nivel de ruido muy bajo. Hay módulos que permiten controlar la velocidad de los ventiladores en grupos independientes. Para usarlos correctamente deberemos realizar varias pruebas una vez montado el servidor para ver que combinación de velocidades es la que menos ruido genera y la que mas ventila los puntos de mayor calor. Típicamente los procesadores, los modulos de ram (pueden llegar a los 90º y aunque nos servirían para cocinar es un poco arriesgado) y las tarjetas gráficas.
Seguramente nos interesará convertir las bahías de 5.25 a 3.5, para poder ocuparlas con discos duros. Hay adaptadores muy baratos, incluso algunos de ellos vienen con ventiladores de bajo ruido lo que refrigera no solo el disco duro, sino tambien la caja.
La fuente de alimentación debe ser potente, a más potencia no hay mucho mas consumo y permanece más fría. Debe tener el máximo número posible de conexiones para los discos duros. Es preferible que sea modular, esto es, que podamos desmontar los cables que no van a ser utilizados para mejora el flujo de aire en el interior de la caja.
Es importante que abarque el tamaño de nuestra placa y que tenga anclajes para los procesadores en el caso de que sean necesarios (Xeon)
9. El SAI.
Es la batería del servidor que salvaguarda las puntas de tensión y en caso de caída de la red eléctrica da una autonomía al servidor hasta que vuelve a estar operativa la corriente. La potencia del sai debe ser superior a la de la suma de watios de los aparatos que tengamos conectados a ella.
Es necesaria si queremos que el servidor esté conectado constantemente, como para por ejemplo, servir páginas web desde casa.